BITÁCORA DE LAURA DEL MAR.

Poemas y cartas; náufragos y sirenas.

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LA MUJER DEL CAMINO - Poemas al amor y la vida.

Voy vagando por laderas
que el camino me ha entregao,
sin medidas, sin trazaos
ni equipaje que me estorbe,
ni brújula que determine
cada paso que yo he dao.

Mis pies sobre la tierra
mis palabras en la alforza
las que eligen su destino
y que enrutan estos versos,
las que detienen su paso,
las que me guían y apoyan.

De estaciones me alimento,
de miraas hoy me inundo,
de colores son mis sueños
del recuerdo hago un mundo,
el que enrumba este lápiz
dibujando en cada letra
de la vida emociones
de tristezas experiencias
y de los seres que encuentro
de ellos me llevo miraas,
brillos, sonrisas y abrazos.

Soy del camino, señora,
de cada nube, cantora,
de la brisa, soy amante,
de la mar dueña y esclava,
y del camino... del camino...
¡mujer!
la que sabe amar sin pena,
la que espera tras la esquina
despojaa de rencores
llevando siempre consigo
poca ropa y muchos libros...
y es mi sino... ¡la esperanza!

Laura, mar y camino; brisa y polvo;
agua y risa; ruido y calma.
Esa soy y lo seré sin tapujos
y sin sombras, que me impian avanzar
por caminos que no trazo,
son las rutas que conducen
con amor y libertá
hacia el exilio seguro
por expresar la verdá...

REINA DE LA MAR...

Recorriendo playas de la alta Guajira
las mismas que un día me vieron crecer
he pasado horas contemplando ida
sintiendo la arena golpear mi cuerpo,
escuchando atenta el rumor de olas
recogiendo conchas, trozos de coral,
he sentido aliento de escribir mis versos
rindiendo homenaje a quien fue mi Padre...

Un día mi viejo tomando mi mano
historias contaba de mares y naves,
de seres inmensos como las montañas
De cánticos bellos que entonan sirenas,
de distancias grandes en el horizonte
de marinos tristes que cruzan las aguas,
de navíos llenos de harina o ropajes
y hablaba de amores dejados en puertos
a mujeres bellas llenas de ilusiones,
así confirmaba versos nerudianos
"que los marineros besan y se van..."

Era muy pequeña, soñadora niña
entre sus palabras siempre me perdía,
soñaba y soñaba con los siete mares
y en una barcaza era yo la reina
y no era un príncipe a caballo blanco
era en una nave rompiendo las olas
que siempre llegaba el marinero azul.

Una de esas tardes de charlas e historias
mi padre sentía su vida partir,
ni cuenta me daba que ya se me iba
la mar me tenía entre sus olajes
allí construyendo mis sueños de niña,
y no eran castillos, ni corcéles raudos,
mis ojos mezclados con agua marina
seguían buscando por si aparecía,
aquel marinero que fuera un pirata
llegara en su barco tomara mi vida
y lejos me llevara cruzando la mar.

Mientras yo soñaba mi Padre moría...
un grito de angustia que formó sunamis
salió de sus labios y me dijo así:
¡Tu eres mi niña... mi Laura del mar...!

Y así yo me firmo desde aquel entonces
llevando en mis ojos el color del mar,
en mi sangre arde la raza guajira
en mi piel recojo herencias perdidas
y un hoyuelo parte mi mentón en dos.
Llevo en mi cabello la canción bendita
de aquella sirena que perdió ilusiones;
hoy supe que tengo un tío poeta
que partió dejando inmortal sus letras
y siento en mi adentro gusto y alegría
de saber que un día heredé mil cosas
que nada a otros valen y colman mis arcas,
que siento que sí, puedo ser poeta
a pesar que tengo la musa perdida.

Y esta es una historia, jamás poesía
sólo deseaba dejar mi constancia
que seguiré siendo de la mar la reina
aunque el marinero un día embarcó...
naufragó en uno de los siete mares
y aquellos mis sueños...
con él se llevó...

A PESAR DE...

A pesar que los años han pasado,
que mi cuerpo se ha hecho grande,
que una cana en mi cabello brilla,
que muchas tempestades he vivido.

A pesar que mis hijos han crecido,
que dos bellos nietos me sonríen,
a pesar que mis hijos han partido
a formar sus propios nidos.

A pesar que mil batallas he librado,
unas he perdido, otras ganado,
ha pesar que mi cuerpo ha cambiado
y que algunas arrugas he encontrado,

no se me arruga el corazón,
aún lo siento niño,
no se me envejece el pensamiento,
cuantas cosas realizo con cariño.

No se me acaba la ilusión,
la fantasía de niña es mi estrella,
se me ocurren locuras
logro que la vida sea bella.

Y le pongo mi fuerza a cada nido,
a esta misión de formar, de educar,
y comparto feliz la gran cosecha,
que en el jardín de mi vida ha florecido.

Cuarenta y nueve años he vivido,
a pesar de mi edad, de mis junios,
planeo travesuras, hago locuras
dejo mi alma en cada acto cometido.

Palmoteo, canto, vibro, bailo,
me gustan los payasos y los títeres,
me emocionan las luces,
le temo a los puentes y a los tigres.

Chapoteo en los charcos de la lluvia,
espanto las palomas en los parques,
juego con las burbujas de jabón.
amo hojarasca bajo mi sandalia.

No me pidas que cambie, hay que reír,
los años pasan y es una sola la vida,
a pesar de las penas, las tristezas,
hay que tomar fuerza y proseguir.

Déjame ser niña, sin dejar de ser mujer,
un día de estos mi luz se apagará,
mis cabellos al viento ya no he de soltar,
mi mano, ya no podrás tomar al caminar.

Déjame ser tu mujer y ser tu niña,
recibe mi ternura, mis pequeñas palabras.
¿No ves que solo los niños saben reír?
Déjame ser niña en la fortaleza de tu vida.

Junio 20 2009
ALAS DEL AMOR...

Mis alas abiertas a la ruta
donde tus brazos ansiosos
hoy me esperan.

Mi trote ágil y sonoro
cual potrillo libre en las montañas,
al final bordeando el horizonte,
te encuentras esperándo mi regreso.

El aroma de la rosa que me entregas
me habla de ternuras olvidadas,
el brillo de tus ojos me embelesa
y de los pétalos el rojo... me apasiona
eres tú retoño de esperanza.

Soy libre capullo de mis rosas
son mis alas fuertes, vigorosas
y mis pasos seguros en los tuyos,
al ritmo de tu piano se deleitan
mientras vibro al recibir tanto cariño,
no quisiera despertar, de este tu arrullo.

ASÍ...

Con las alas extendidas,
bañada de rosas y luna,
vestida en seda y satín
he llegado para amarte
dispuesta estoy a brindarte
todo aquello que ayer,
por tonta y necia te negué.

Así.., limpia, serena y pura
con la mirada tranquila,
con mi alma color esperanza
con la paz en mi semblante
y en mis letras la ternura
así... hoy llego a tus brazos
despojada de pesares,
olvidada de lamentos
anhelando hoy amarte.

Así... Hoy llego a tus lares
animada y bendecida
al saber que tú me quieres
que me piensas y reclamas.

Por tí, hoy vuelvo a soñar.
Por tí, de nuevo al amar.
Por tí, sin sombras, ni llanto
hoy regreso con mi canto
invadida de ilusiones
a tomar tu mano fuerte
iniciando éste sendero
que me conduce a tus brazos.

¡Ah! Así... ¡Así...!
Como nunca he sido amada
como ahora hoy sonrío
rodeada de rosas y aves
que me adornan y hoy entonan
dulce trino de alabanza.

Así... Una palabra, un beso,
somos dos que hoy encontramos
un motivo que nos brinda
mil razones para amarnos.


ME JUZGAS...

Dices que tengo el alma de hierro
que un escudo llevo vestido por dentro
que en mi corazón doble cerradura
he puesto invisible atajando el amor.

No juzgues, no acuses,
no lances palabras por tu frustación,
llevo acá enterrada, profunda, aferrada
la daga bendita de un amor sagrado.

¡Ah!, si te dejara pasar mi frontera
si estas barreras dejara hoy abiertas
seguro que nunca recriminarías
sin saber siquiera motivo o razón.

Hoy te dejo en versos un poco asomar
que tras la muralla soy una mujer
que ama con ganas, con fuerza y lealtad,
que entregué mi vida tres años atrás,
desde esa noche de amoroso abril
al son de zampoñas, de vino y amor,
un hombre poeta en mi corazón
esculpió sus versos, imborrables son.

Su pluma es de oro, sus versos de amor,
lleva en su mirada pasión y furor,
no importa que lejos de mí hoy esté
para mi es la vida, mi razón, mi ser.

Con estos mis versos te quiero decir
que de hierro el alma no tengo forjada,
si miras mis ojos y en ellos la luz
es por ese amor que me llegó en abril.